En la naturaleza nada es independiente: los seres vivos están unidos por un
número infinito de hilos invisibles, vínculos que el hombre, como cualquier otra
especie, está obligado a respetar. Este libro desenreda esa metafórica madeja
a través de dieciocho sorprendentes capítulos sobre el impacto —casi siempre
negativo— que tiene la intervención humana en el medio natural. Un libro de
relatos en el que se despliegan historias increíbles, protagonizadas por ranas
de oro, gatos caídos del cielo, arañas astronautas y escarabajos que se han
ganado una estatua conmemorativa.
A pesar de no ser un libro científico en sentido estricto, Gianumberto Accinelli,
con la ayuda de las estilizadas y poco convencionales ilustraciones de Serena
Viola, ha construido un texto a medio camino entre el cuento y el ensayo.
Relaciona entre sí hechos verídicos y constatables con un estilo ameno que
hace que la ciencia resulte, no solo comprensible para los lectores juveniles,
sino también una experiencia entretenida.