Un día de invierno del año 1903 en el remoto paraje de Outer Banks, Carolina del Norte, dos hermanos de Ohio hasta entonces desconocidos, Wilbur y Orville Wright, cambiaron el rumbo de la historia iniciando la era del vuelo con la primera máquina a motor tripulada más pesada que el aire.
Los hermanos Wright fueron hombres de excepcional talento, férrea determinación y gran curiosidad intelectual, cualidades que ellos atribuían a su educación.
En este interesante libro, el magistral historiador David McCullough ahonda en la inmensa riqueza de los «Documentos Wright» —los diarios personales, los apuntes y las más de mil cartas que componen la correspondencia privada de la familia— para contarnos el lado humano de una historia genuinamente americana.