1957, en las afueras de Londres
Jean Swinney es redactora de crónicas y reportajes en un periódico local, está desengañada en el amor y, a punto de cumplir los cuarenta, lleva una vida limitada con su malhumorada y demandante madre.
Cuando una joven suiza, Gretchen Tilbury, contacta con el periódico afirmando que su hija es fruto de una concepción virginal, le corresponde a Jean descubrir si se trata de un milagro o de un fraude.
Sin embargo, cuanto más indaga sobre el tema, más se entrelaza su existencia (de una manera extraña, aunque no desagradable) con la vida de los Tilbury: la propia Gretchen, su marido, Howard, y su encantadora hija Margaret.
No obstante, ellos son el centro de los hechos que Jean está investigando para el periódico; una historia que parece propagar cada vez más vibraciones oscuras en sus vidas.
Y, aun así, Jean no se atreve a descartar la posibilidad de probar por fin las mieles de la felicidad.
Pero habrá un precio que pagar, y será insoportable.
«El ojo de Chambers para los detalles inexpresivos alcanza una lucidez larkinesca. Ambientada en la Gran Bretaña de la posguerra, es una historia llena de compasión y un talante tranquilo».
The Guardian
«Pequeños placeres no es un romance delicado, sino una novela convincente sobre el deber y el deseo».
Sunday Telegraph